Como ya va siendo habitual, quedamos a las 9:00 de la mañana en la gasolinera de Valderrobres, donde poco a poco fue apareciendo la gente, hasta un total de 24 valientes y valientas, ya que el tiempo nublado y frío no invitaba mucho a caminar.
Aún así, nos agrupamos en vehículos y nos dirigimos a la localidad de Fuentespalda, punto de partida de nuestra excursión. Después de una breve charla y de unos cuantos consejos útiles, comenzamos la marcha hacia La Picosa siguiendo el GR -8, que se toma al lado del camping. Poco a poco y siguiendo la senda, bien marcada con las inconfundibles marcas rojas y blancas, fuimos ganando altura, dejando a nuestra espalda una increíble mole (la Peña del Corb) y el pueblo de Fuentespalda. Entre pinos, remontando poco a poco las curvas del camino y con la compañía de nuestros dos cánidos (Rambo y Panchita), llegamos al Collado del Peirón (donde se encuentra la Virgen del Tremedal), primera parada de nuestra ruta.
Tras una breve pausa para recupara el aliento e hidratarnos, continuamos nuestra marcha siguiendo una ancha pista a nuestra izquierda (bien señalizada con unas flechas que indicaban nuestro destino), que tras un agradable paseo muy suave, donde aprovechamos para charlar, nos dejaba al comienzo de la senda de subida. Dicha senda, que pasa al lado de una antigua nevera, nos internó en un precioso bosque de carrascas y encinas, y en fila india y con cuidado, fuimos remontando una pedrera, que en algunos momentos nos ofrecía unas increíbles vistas del lugar.
Poco a poco nos íbamos acercando a la cima y la senda a través del bosque no dejó a los pies de las rocas cimeras de La Picosa. Un último arreón siguiendo las trazas de la senda entre las rocas, nos colocó al lado de las rocas de la cima (donde algunos aprovecharon para encaramarse a lo alto y retratarse), desde la cual se contemplaba la cresta que nos llevaría hasta el extremo más alejado de la montaña.
El último esfuerzo, ya que el frío ya arreciaba a esta altura, nos condujo hasta el vértice de la cresta y allí pudimos disfrutar de unas vistas chulísimas (podían haber sido mejores... me cachis en las nubes): el embalse de Pena, la Caixa, Peña Galera, Los Puertos, Beceite, Valderrobres, y casi toda la Comarca.
Foto de rigor en la cumbre y para abajo, ya que la nieve empezaba a hacer acto de presencia (ni siquiera los meteoros se querían perder este estreno).
En cotas más bajas y resguardados un poco del frío, dimos cuenta de un merecido almuerzo, regado, como no, por el vino de la bota de Toño, presente en todas las salidas del Club.
Y después de este pequeño "break", y viendo que la nieve arreciaba, decimos volver a los vehículos desandando lo andado, disfrutando del descenso por la pista y el GR - 8 e incluso sintiendo los rayos de sol al final del recorrido.
Un estreno magnífico, en una magnífica compañía para nuestro "Pico a Pico por el Matarraña". Muchas gracias a todos y todas por vuestra colaboración.
Y recordad... la próxima cita el 28 de febrero para ascender a Peña Galera.
Aún así, nos agrupamos en vehículos y nos dirigimos a la localidad de Fuentespalda, punto de partida de nuestra excursión. Después de una breve charla y de unos cuantos consejos útiles, comenzamos la marcha hacia La Picosa siguiendo el GR -8, que se toma al lado del camping. Poco a poco y siguiendo la senda, bien marcada con las inconfundibles marcas rojas y blancas, fuimos ganando altura, dejando a nuestra espalda una increíble mole (la Peña del Corb) y el pueblo de Fuentespalda. Entre pinos, remontando poco a poco las curvas del camino y con la compañía de nuestros dos cánidos (Rambo y Panchita), llegamos al Collado del Peirón (donde se encuentra la Virgen del Tremedal), primera parada de nuestra ruta.
Tras una breve pausa para recupara el aliento e hidratarnos, continuamos nuestra marcha siguiendo una ancha pista a nuestra izquierda (bien señalizada con unas flechas que indicaban nuestro destino), que tras un agradable paseo muy suave, donde aprovechamos para charlar, nos dejaba al comienzo de la senda de subida. Dicha senda, que pasa al lado de una antigua nevera, nos internó en un precioso bosque de carrascas y encinas, y en fila india y con cuidado, fuimos remontando una pedrera, que en algunos momentos nos ofrecía unas increíbles vistas del lugar.
Poco a poco nos íbamos acercando a la cima y la senda a través del bosque no dejó a los pies de las rocas cimeras de La Picosa. Un último arreón siguiendo las trazas de la senda entre las rocas, nos colocó al lado de las rocas de la cima (donde algunos aprovecharon para encaramarse a lo alto y retratarse), desde la cual se contemplaba la cresta que nos llevaría hasta el extremo más alejado de la montaña.
El último esfuerzo, ya que el frío ya arreciaba a esta altura, nos condujo hasta el vértice de la cresta y allí pudimos disfrutar de unas vistas chulísimas (podían haber sido mejores... me cachis en las nubes): el embalse de Pena, la Caixa, Peña Galera, Los Puertos, Beceite, Valderrobres, y casi toda la Comarca.
Foto de rigor en la cumbre y para abajo, ya que la nieve empezaba a hacer acto de presencia (ni siquiera los meteoros se querían perder este estreno).
En cotas más bajas y resguardados un poco del frío, dimos cuenta de un merecido almuerzo, regado, como no, por el vino de la bota de Toño, presente en todas las salidas del Club.
Y después de este pequeño "break", y viendo que la nieve arreciaba, decimos volver a los vehículos desandando lo andado, disfrutando del descenso por la pista y el GR - 8 e incluso sintiendo los rayos de sol al final del recorrido.
Un estreno magnífico, en una magnífica compañía para nuestro "Pico a Pico por el Matarraña". Muchas gracias a todos y todas por vuestra colaboración.
Y recordad... la próxima cita el 28 de febrero para ascender a Peña Galera.
Pero que güeno y que bien detallado!!!! A la próxima allí estaremos!!
ResponderEliminarUn abrazooo